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Frenos ABS: qué son y para qué sirven

03/04/2022

El sistema de frenos ABS (Antilock Bracking System) es aquel que permite detener rápidamente un coche o camión, evitando que cualquiera de las ruedas se bloquee prematuramente. Un bloqueo de cualquiera de las ruedas, mientras el vehículo no esté completamente detenido, originará un peligroso derrape descontrolado del vehículo.

La frenada de emergencia es la condición en la cual puede llegar a activarse el ABS, ya que la fuerza de frenado es tan grande que puede bloquear completamente una o más ruedas. Si los sensores no detectan un bloqueo parcial o total de alguna rueda, el frenado
se efectúa igual a los sistemas convencionales (sin ABS).

Es importante aclarar que el sistema antibloqueo de freno es totalmente automático. Por lo tanto, el conductor no tiene que hacer nada más, sino mantenerse atento al volante y al camino.

Exceptuando condiciones de competición, el sistema ABS solo funcionará en muy pocas ocasiones. Sin embargo, es un sistema de seguridad que puede salvarnos la vida en situaciones imprevistas. No contar con un sistema ABS es actualmente un alto riesgo tanto para los peatones como para todos los vehículos que circulen por calles y carreteras.

Breve historia del sistema de frenado ABS

Las primeras aplicaciones técnicas de un sistema antibloqueo de frenos aparecen en la década de los años treinta, pero en el campo de la aviación. La alta velocidad de un avión al momento del aterrizaje y la necesidad de hacer más cortas las pistas motivó la
implementación de unos frenos más eficientes.

Con relación a los coches y camiones, también se hicieron pruebas para implementar sistemas de frenos ABS, pero eran poco eficientes, voluminosos y costosos. Así transcurrieron 4 décadas hasta que, a partir de los años setenta, el desarrollo de la electrónica de estado sólido solucionó los inconvenientes técnicos anteriores. Bosh, Teldix, Mercedes-Benz y Chrysler, entre otros, fueron empresas pioneras en el desarrollo e implementación de este tipo de frenos.

En la década de los años 90, el uso del sistema de frenado ABS no solo se extendía cada vez más, sino que mejoraba constantemente. Más adelante, para el año 2000 se estimaba que más del 60% de los vehículos en el mundo tenían frenos ABS. Finalmente, a partir del año 2004, el ABS era de uso obligatorio en toda Europa.

¿Cómo funcionan los frenos ABS y cómo están constituidos?

En una frenada de emergencia, cuando comienza a bloquearse cualquier rueda, los frenos ABS deberán hacer muchos ciclos automáticos de liberación y aplicación. Estos ciclos pueden repetirse a una frecuencia de 10 y 15 veces por segundo, impidiendo el bloqueo de dicha rueda. Por esta razón, el conductor notará rápidas vibraciones en el pedal del freno y en toda la estructura del coche, pero no debe alarmarse por eso.

El sistema de frenado ABS en la práctica es un sistema convencional de freno, al cual se le han insertado nuevos dispositivos electrónicos y mecánicos. Estos nuevos elementos o componentes serán explicados a continuación.

Sensores de velocidad de los frenos del coche

Cada rueda tiene un sensor de tipo inductivo, que es excitado por un aro magnético que gira con la rueda. La salida de cada sensor inductivo es una señal eléctrica pulsante, y su frecuencia va en función directa a la velocidad de rotación de la rueda. Esta señal se
transmite mediante cables hasta el módulo electrónico ABS.

Central hidráulica de los frenos del coche

Este pequeño conjunto mecánico tiene cuatro orificios por donde entra el fluido hidráulico que sale de la bomba de freno (sistema convencional). Por otra parte, posee cuatro orificios de salida hacia las mordazas de cada rueda.

Internamente lleva ocho electroválvulas (dos por cada orificio de salida). La aplicación o liberación de las mordazas de freno de cada rueda se realiza con dos electroválvulas.

También contiene un pequeño acumulador hidráulico y una electrobomba de retorno de fluido hidráulico.

Módulo electrónico ABS del sistema antibloqueo de frenos

A este módulo se le conoce también como ECU. Es una tarjeta electrónica con varias entradas, múltiples salidas, un microprocesador y una memoria EEPROM. Los cables de los cuatro sensores de velocidad van conectados a este módulo electrónico. Además, también recibe la entrada de la señal eléctrica del pedal de freno.

Los cables de control de las 8 electroválvulas de la central hidráulica se conectan también a este módulo electrónico. Además, la electrobomba va conectada al módulo. Tanto las electroválvulas como la electrobomba son controladas totalmente por el módulo
electrónico.

El módulo realiza un control de lazo cerrado, que comienza calculando la velocidad real del coche, mientras se va frenando. Luego, supervisa qué ruedas pueden estar comenzando a bloquearse. Si alguna rueda tiene una velocidad de giro por debajo de lo correcto, el módulo activa brevemente la electroválvula de liberación de la mordaza. Todo este proceso es muy rápido, preciso y repetitivo, hasta que se detiene completamente el coche o se levanta el pedal del freno.

Importancia del sistema antibloqueo de frenos

Una frenada de emergencia con sistema antibloqueo reduce casi en un 40% la distancia de frenado, en comparación a un sistema convencional. Además, podremos controlar el
vehículo todo el tiempo, ya que no habrá posibilidades de derrape. Estos sistemas antibloqueo han evitado miles de colisiones entre vehículos y arrollamientos de peatones.

¿Cómo podemos mantener en buen estado los frenos del coche?

Una adecuada inspección técnica a los frenos, cada seis meses, es fundamental para detectar cualquier anormalidad. En este sentido, si tu vehículo es un Mercedes-Benz, lo recomendado es buscar un centro de servicio especializado como GM Chamorro. Contamos con un personal capacitado para inspeccionar el estado de los frenos de cualquier modelo Mercedes-Benz.

Además, es recomendable cambiar el fluido hidráulico de freno cada cierto tiempo, ya que va perdiendo sus propiedades. Por otra parte, se deben corregir las fugas de fluidos y cambiar las pastillas de freno que estén desgastadas o cristalizadas. Finalmente, los repuestos de los frenos ABS deben ser originales o de marcas de reconocida calidad.